Y lo siento. Vaya si lo siento...
Lo siento por que soy un cinefago empedernido. Me gusta el cine, disfruto como un verdadero cabrón consumiéndolo. Me gusta Balagueró, me gusta Plaza y maldita sea me gusta REC.
Pero REC 4 no es REC. Te deja la sensación de que nunca ha habido un REC. Entiendo que cuando uno tiene una "criatura" rentable en las manos, es muy lícito e interesante ampliar la familia creando una saga. Igual no lo tenías pensado, igual la cosa se te ha ido de las manos por que no pensabas que el éxito de la idea iba a reclamar mas sangre. Pero una vez tomas la decisión, una vez te embarcas en ello, estaría bien que te ocupases de que el resultado estuviera a la altura.
REC 4 falla por varios motivos. Para explicar el primer problema tenemos que hablar de las tres anteriores. El film está infectada por el virus "LOST", también llamado "Prometer hasta meter..."
Y es que en la primera, un virus convertía a la gente de un edificio de Barcelona en una especie de zombies rabiosos, para al final, descubrir que estaban poseídos.
ZAS en toda la boca...
En la segunda, se profundizaba un poco mas en el tema posesión y la tralla subía un nivel mas con una dosis mayor de acción, sin dejar de lado eso si, el formato "cámara en mano" que tan buen resultado había dado en la primera parte, regando un poco mas el concepto para que creciese sano y fuerte incluyendo mas tipos de cámaras. Y por si eso fuera poco, al final resulta que el diablo parece ser una babosa asquerosa que te hace plantearte si en una vuelta de tuerca maestra, los guionistas quisieran que pensaras que el anticristo viene del espacio exterior... reíros si queréis pero yo llegue ha pensarlo... y me encantó.
ZAS en toda la boca de nuevo.
La tercera rompe con el estilo y las formas, lo hace con maestría y con clase, la transición del "Found Footage" al cine tradicional esta hecha con mucha gracia. La película esta bien realizada, los actores están sembrados, intenta de forma voluntariosa ser respetuosa con la mitología creada y además está bien vendida. Bien vendida por que se anunció conjuntamente con la cinta que nos ocupa. Y daba la impresión de que Paco Plaza se iba a encargar de un entretenimiento ligero y sangriento, que funcionaría como una historia que sucedía a la vez que los hechos acontecidos en las dos partes anteriores, en otro lugar, con otras personas, preparando así el terreno para jugar con unas reglas ligeramente diferentes sin que el fan se "ofendiese". Y que mas tarde, Balagueró, cerraría la saga con un final directo continuando la narración de REC y REC 2.
Disfrutamos como gorrinos con REC 3, a mi juicio la mejor película de la saga, pensando que lo mejor acechaba aun a la vuelta de la esquina.
ZAS por tercera vez.
Y llega REC 4...
Y Volvemos a lo del síndrome "LOST", al primer error de la película, ningunear el esfuerzo anterior. Lo que REC 4 te enseña, es que daba igual infectados que poseídos que babosas, no por que no se explique nada, que no se hace y tampoco hay una ley que obligue a hacerlo. Si no por que da igual, no tiene ninguna repercusión en la trama el hecho de que fuese una cosa u otra. Y esto, después de los dos primeros finales que funcionaban como giro argumental, es como un jarro de agua fría.
Todo en la película te resulta indiferente, entre otras cosas por que los actores no consiguen en ningún momento que empatices con los personajes que interpretan. Una de las figuras icónicas de la saga, la agitada reportera Ángela Vidal interpretada por Manuela Velasco, esta fuera de juego mas de la mitad del metraje y cuando toma las riendas preferirías que no lo hubiera hecho jamas. Paco Manzanedo en el papel de Guzmán, no parece encontrar el gesto que acompañe a lo que acontece en la trama, y te descoloca cada vez que aparece. Su compañero Lucas, interpretado por Críspulo Cabezas lo hace considerablemente mejor, que no es mucho. María Alfonsa Rosso no lo hace mal, pero la inclusión de su personaje esta forzada y no encuentra el sitio en ningún momento. Salvaría un poco de la quema a Mariano Venancio como el capitán del barco, a Héctor Colomé como Dr. Ricarte, Ismael Fritschi como Nic, y a algunos secundarios como Cristian Aquino como el cocinero Edwin o Emilio Buale como Jesu. Personajes con pocas lineas (exceptuando quizas Colomé) que cumplen bastante bien.
Y bueno, el final te deja con la misma cara que ponen los protagonistas en la ultimísima escena del film.
Jaume Balagueró me parece un gran director, lo ha demostrado muchas veces, tantas veces como para que se pueda permitir un REC 4 sin que eso baje su "barra de saber hacer" ni un jodido milímetro. Pero la película es mala joder y hay que reconocerlo aunque duela.
No todo en la película es para tirarlo por la borda. La factura técnica no se puede despreciar. Pero brilla para nada...
En fin... una putada.
Por cierto...lo que tendrían que hacer es convertir el libro "REC: Los relatos perdidos" en una serie de televisión... ¡Corred insensatos!
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