miércoles, 19 de noviembre de 2014

La estanquera de la Antártida




Debía de ser el año 1991 mas o menos cuando aquel doble programa apareció ante mis ojos. Quizás solo era una idea que había viajado atrás en el tiempo desde el 2014 para plantar la semilla de su existencia como si de un Kyle Reese se tratara. Pero teniendo en cuenta la dificultad actual del ser humano para viajar en el tiempo, aun estando a unos meses de robocordones, aeropatines y almanaques deportivos, me inclino a pensar que solo fue una idea que se quedo archivada en mi cerebro en la "E" de "Esto igual me sirve de alguna cosa en un futuro".


Era agosto de eso estoy seguro. Acababa de cenar y me tumbé en la cama. Encendí la pequeña televisión de rayos catódicos y ¡BOM! "La cosa" de Carpenter estaba a punto de empezar.

Todo en "La Cosa" pintaba bien desde el principio y encima saliendo Plissken Burton Cash al que todos llamábamos Serpiente, todo pintaba mejor aun.

He visto desde entonces muchísimas veces la película y hay una constante que llama siempre mi atención y que 23 años después ha dado nombre a este blog es el sombrero de MacReady.




El sombrero que Kurt Russell lleva en la película es inquietantemente grande. Es como uno de esos sombreros de cowboy o de mejicano caricaturescos, pero a nadie parece importarle en la Antártida, supongo que tienen otros problemas. Pero aun así yo no descartaría que la criatura... el enigma de otro mundo... Llegase a ese punto de nuestro planeta después de tener que elegir entre las dos estructuras construidas por el hombre que se pueden ver desde el espacio a simple vista, es decir, la gran muralla china (Será una leyenda urbana, pero yo llevo años dándola por cierta) y el sombrero de MacReady.

Desde ese día el sombrero de MacReady se convirtió para mi en un icono del cine. A la altura de el de Indiana Jones, el chaleco de Han Solo o la gorra interruptor de Lincoln Hawk, pero menos socorrido. Bueno... menos socorrido que la gorra interruptor de Lincoln Hawk no hay nada.

Mientras salían los créditos finales de la película y aun se podía escuchar el crepitar de las llamas en la nieve, yo me debatía entre dormir, que es una cosa que nunca se me ha dado demasiado bien, o ver si hacían algo interesante después de "La Cosa".

No tardaron mucho los créditos en desaparecer en esa costumbre tan fea que antes tenía la televisión sin excepción, de cortarlos de repente de una forma casi ofensiva.

Y comenzó de sopetón "La estanquera de Vallecas" creando así un improbable programa doble que se quedaría en mi memoria desde entonces. Me resulta imposible pensar en una sin pensar en la otra. "La Cosa" y "La estanquera de Vallecas" siempre formaran parte de la misma moneda.






"La estanquera..." dirigida por Eloy de la Iglesia es otra gran película. Leandro, Tocho, Doña Justa y Angeles se las ingenian en un estanco de Vallecas para que no eches de menos extraterrestres, sombreros desproporcionados y efectos especiales. Dejando incluso escenas de acción trepidantes para la posteridad como la gran carga policial con Jesus Puente en medio del asunto...




Ver las dos películas seguidas como si fueran una es una experiencia catártica. Así que... ¡Corred insensatos!

Este blog nace con la intención de hablar de cine, mucho cine, pero su nombre refiere a un sombrero muy grande y en los sombreros grandes cabe de todo. Y en este en concreto cabe cine, series, libros, comics, música... cultura en definitiva. Hablar de todo ello de una forma un tanto personal. Como un sombrero que reposa cómodamente en tu cabeza, no que cuelga solitario de un perchero.

Sirva esta primera entrada como una declaración de objetivos, no un memorandum, una declaración de objetivos, ya saben, una sugerencia para el futuro del blog... Como decía Jerry Maguire.

Espero que este sea el comienzo de una hermosa amistad...







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